El último informe del Grupo MATE (Mirador de la Actualidad del Trabajo y la Economía) detalla un panorama de fuerte deterioro para los trabajadores estatales, los jubilados y, en paralelo, para la estructura productiva de la provincia.
La comparación de la actividad económica actual con la de 2023 muestra un panorama engañoso: la provincia exhibe una mejora estadística por la recuperación agroindustrial tras la sequía de aquel año. Sin embargo, el resto de los sectores –industria, comercio, servicios– presentan caídas significativas, con un impacto directo en la calidad del empleo y los ingresos de los hogares.
El informe concluye que el gobierno provincial aplicó un ajuste “más profundo del necesario”, con un costo social elevado y con consecuencias de largo plazo en la estructura laboral y productiva santafesina.
Los salarios estatales, los más golpeados
El gasto en remuneraciones –principal erogación del Estado santafesino– cayó a mínimos históricos en comparación con los recursos disponibles: del 42% al 32%.
Cada trabajador estatal perdió en promedio 6,2 millones de pesos desde el inicio de la gestión Pullaro.
Los incrementos esporádicos por “premios” no lograron recomponer la pérdida.
El deterioro se refleja especialmente en la docencia, un sector que ya mantenía tensiones salariales con el Ejecutivo.
Jubilaciones con el menor peso en 15 años
El ajuste también se sintió en las jubilaciones. En 2023, de cada 100 pesos de recursos provinciales, 20 se destinaban al pago de jubilaciones. Hoy, esa cifra cayó a 16 pesos, el nivel más bajo en más de una década.
El impacto de la crisis nacional en Santa Fe
El informe de MATE también advierte que la economía provincial recibe de lleno los efectos de la política económica nacional:
Cierre de empresas: cerca de 1.800 establecimientos productivos bajaron sus persianas desde que comenzó el gobierno de Javier Milei.
Destrucción de empleo registrado: se perdieron 14.500 puestos formales, de los cuales más de 6.000 corresponden a la industria santafesina.
Salario privado en retroceso: cada trabajador del sector privado perdió en promedio 1,4 millones de pesos de bolsillo desde diciembre de 2023 hasta mediados de 2025, pese a la recuperación parcial en el último año.
Una economía desequilibrada
La comparación de la actividad económica actual con la de 2023 muestra un panorama engañoso: la provincia exhibe una mejora estadística por la recuperación agroindustrial tras la sequía de aquel año. Sin embargo, el resto de los sectores –industria, comercio, servicios– presentan caídas significativas, con un impacto directo en la calidad del empleo y los ingresos de los hogares.